Establecer una cultura donde prima la confianza para todos

Solemos recurrir a la tecnología para protegernos frente a las ciberamenazas. Pero va mucho más allá. Una cultura sólida en la que prime la confianza puede ofrecer a todo el mundo una estructura que dota de sentido a nuestras vidas y nos facilita la toma de decisiones.
Establecer una cultura donde prima la confianza para todos

Todos hacemos casi a diario alguna clase de transacción en línea. Ya sea comprobar el correo electrónico, hacer alguna compra o pedir comida a domicilio, no solo estamos compartiendo dinero, sino también nuestra información personal con multitud de personas, empresas y sistemas. En este universo en línea, necesitamos algún tipo de seguridad. Es fundamental confiar en que la información que compartimos siga siendo confidencial, y que las empresas con las que la compartimos hagan todo lo posible para protegerle a usted y sus datos.

Puede resultar aterrador y un tanto abrumador si lo pensamos. Pero el concienciación sobre seguridad es el primer paso para protegerse a uno mismo y nuestra información. La concienciación también desempeña un papel importante a la hora de establecer una sólida cultura de la confianza y la seguridad en el seno de cualquier organización.

He aprendido esto en primera persona trabajando en Salesforce, y hemos presenciado lo en serio que nos tomamos la confianza (es nuestro valor número uno después de todo). Desde el primer día, los fundadores de Salesforce comprendieron que el valor de nuestros productos y servicios depende directamente del grado de confianza que los clientes depositan en nosotros para proteger su información.

¿Por qué hablamos de cultura?

A primera vista, la ciberseguridad suele contemplarse como un mero aspecto técnico, con soluciones puramente técnicas. Instalamos un antivirus y a comernos el mundo, ¿verdad? No necesariamente. Aunque las soluciones técnicas son algunas de las más sencillas de implementar, ya que reducen las posibilidades de que un usuario realice alguna conducta de riesgo, ninguna tecnología protege contra todas las decisiones o acciones de los usuarios.

Tanto si hablamos de una corporación global como de una vivienda particular, una estrategia de seguridad multicapa, que tenga en cuenta todas las complejidades del comportamiento humano suele dar mejores frutos. ¿Y eso por qué? Aunque las personas tenemos la capacidad de razonar, somos seres complejos y no siempre hacemos lo que más nos conviene a nosotros o a nuestra organización. Podríamos decir que "hay cosas que no se pueden evitar". No somos máquinas y no se nos puede exigir que nos comportemos como tal. Y aquí es donde la cultura entra en juego.

Cuando se trata de grandes empresas, a menudo se menciona esa idea tan extendida de que "la cultura se merienda a la estrategia", lo cual es cierto en muchos sentidos. No significa que la estrategia no sea importante, sino que, solo con estrategia, sin una cultura que la respalde, no llegaremos muy lejos. No obstante, la "cultura" apenas tiene significado si no definimos, comprendemos y cuestionamos los valores subyacentes a la misma. Después de todo, las culturas en las que participamos también forman parte de nuestras identidades particulares.

En Salesforce, nos esforzamos por diseñar una cultura donde prime la seguridad, fomentando conductas y toma de decisiones de seguridad positivas a través de una visión donde la confianza ocupa el lugar más prominente. Nuestros empleados son una línea defensiva crítica para proteger los datos de nuestra empresa y de nuestros clientes, fomentando el concienciación sobre seguridad, la implicación y la educación como requisitos indispensables.

¿Qué forma adopta la confianza en el día a día?

Uno de los aspectos clave que trabajamos en el equipo de Concienciación sobre seguridad de Salesforce es el de reforzar nuestro valor de confianza cuando preguntamos a cualquiera que haga un cambio o que se comporte de modo que promueva la seguridad. Eso significa que no solo destacamos aquellas conductas que marcan la diferencia, sino que también nos preguntamos a nosotros mismos cómo podemos fomentar la confianza. 

A menudo, esa pregunta se traduce en reflexionar más a menudo y tomarnos unos instantes para responder a la pregunta: "¿Mi forma de actuar transmite confianza?". Luego lo aplicamos a acciones cotidianas, tales como:

  • Pensar un segundo antes de pulsar Enviar, para asegurarnos de que estamos enviando la información correcta a la persona indicada.
  • Tomarse el tiempo necesario para auditar sus cuentas y comprobar que tiene la autenticación multifactor activada.
  • Usar un gestor de contraseñas y no repetir ni compartir las contraseñas.
  • Denunciar las estafas y el phishing a la persona indicada, ya sea su proveedor de Internet o del terminal, o bien el equipo de respuesta a incidentes de su empresa.
  • Saber qué hacer y a quién acudir si hay algún problema.
  • Ser bueno con uno mismo y hacerse un plan que facilite las cosas en caso de emergencia. 

Una de las piezas fundamentales en el establecimiento de una cultura de la confianza es saber que todos cometemos errores, pero que no estamos solos. Transmitir confianza significa no avergonzarse de pedir ayuda cuando hay algún problema. Se trata de centrarse en lo que uno sabe hacer, no en lo que no sabe. Recuerde que estamos juntos en esto y que una cultura no es nada sin personas que se identifiquen con ella. Una cultura de la confianza sólida puede ofrecer a todo el mundo una estructura que dote de sentido a nuestras vidas y nos facilite la toma de decisiones. 

Para obtener más información acerca de la importancia de la confianza y de cómo tomar buenas decisiones en línea, consulte el Centro de aprendizaje sobre ciberseguridad, una iniciativa encabezada por Salesforce con ayuda de Fortinet, la Global Cyber Alliance y el Foro Económico Mundial. Esta plataforma de aprendizaje en línea, incluida nuestra Ruta sobre aspectos básicos de seguridad, capacita a cualquier persona que quiera mejorar sus habilidades de seguridad.



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